miércoles, 29 de marzo de 2017

La victoria de la columna

Jueves Santo, hombres de chaqueta y mujeres de mantilla, bendita tradición de la mujer sevillana. Hace sol, y la ciudad se va preparando para la madrugá. Y en la fábrica de tabaco se preparan los nazarenos y costaleros para realizar la estación de penitencia.

  Jesús atado a la columna va camino de la catedral, castigado por "el tio del látigo". Viene con su banda, con esos sones cigarreros inconfundibles. Castigan con saña al hombre que es el que es.

  Y una victoria viene por el Postigo, una niña dulce y sevillana, que engalana la tarde y la noche. Ese palio de cajón esos sones y ese andar fino y elegante que tiene la gente de los Villanueva.

  Una hermandad que recorría Triana, una más de las que se dicen, son de aquí, esos cambios en el misterio, y ese palio alegre es el contraste de lo que es ahora esta hermandad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario